115 AÑOS DE AMOR AL COLEGIO

ENTREVISTA A LOS ORGANIZADORES DE LA FIESTA
Ana Albanell, Tatiana Costa y Manuela Varela

¿SON EX ALUMNAS? ¿DE QUÉ GENERACIÓN?

Tatiana Costa: ¡Sí! Generación 2004.

Anita Albanell: Si, yo soy generación 1996. Es una generación que se junta bastante, hemos logrado hacer varias reuniones y el año pasado se cumplieron 25 años del egreso. Es una generación bastante activa y presente.

Manuela Varela: Soy generación 2005, una abajo de Tati. Caigo en la cuenta de que el año que viene cumplimos 20 años de que nos fuimos del Colegio… me parece un montón…

LAS 3 TRABAJAN EN EL COLEGIO ¿A QUÉ SE DEDICAN?

TC: Me encargo de la parte de Community Commitments en primaria y secundaria. Son todas las campañas sociales que hace el Colegio.

AA: Trabajo en el Senior, en la dirección con el Head of Senior que en este momento es Andrew Bunt y hago toda la parte IB, los viajes a UK, Time Table, esa es mi área de trabajo, muy cerca del Head of Senior. Movido, hay para entretenerse.

MV: Yo estoy en el área de Communications, buscando cómo mejorar y hacer más eficiente la comunicación del Colegio con los diferentes públicos, optimizar los canales de comunicación existente y buscando nuevas formas de hacer llegar los mensajes, que son muchos y variados.

¿QUÉ RECUERDOS TIENEN DE LA ÉPOCA DEL COLEGIO?

TC: Justo cuando veníamos para acá veíamos a los chicos nadando y nos acordábamos de las swiming galas.

AA: Eran impresionantes. Estaba todo el Colegio alrededor de la piscina y cuando te tocaba, te tenías que parar en el cubo de largada, enfrente de todos.

Recuerdos, los mejores. Una de las ideas de esta celebración de los 115 años, fue la de reflotar aquellas actividades que principalmente por la pandemia quedaron relegadas. Muchas tenían que ver con el school spirits, con las houses.

TC: Ese school spirits, que es lo que tenemos en común todos los que vinimos a este colegio. Nos pasábamos todo el día aquí, era nuestra segunda casa de verdad.

MV: Uf…. Un montón de recuerdos que lógicamente salen a la luz con mucha mayor facilidad al estar trabajando acá. Las clases en los laboratorios, Susana Pazos, Niobe que metía el Fiat Uno hasta la puerta, la cantina de Rose y los “koli” la comida de enfrente, la emoción al cambiar al “uniforme de 5to y 6to”, las graduaciones, los partidos de hockey…

¿PARTICIPARON DE LA ORGANIZACIÓN CUANDO EL COLEGIO CUMPLIO 100 AÑOS?

TC: Estuvimos, pero como invitadas. Yo estaba recién egresada.

AA: Yo vine con panza de 9 meses de mi hijo que ahora está en Form II en el Colegio y con mi hija Juana que está en 2do de liceo.

MV:  Fui como invitada. Un despelote.

¿FUERON A VER QUE SE HABÍA HECHO PARA ESA FIESTA O DIJERON VAMOS A ARRANCAR DE CERO CON TODO NUEVO?

TC: Si fuimos a buscar información sobre quienes habían venido, como la habían organizado.

AA: La idea era tener una celebración de ese nivel digamos, pero una de las cosas que nos gustaba era el desafío de no repetir el mismo formato y en esta ocasión, teniendo en cuenta que habíamos tenidos 2 años de Pandemia y que durante ese tiempo los padres no habían podido concurrir a las celebraciones, todo ese tiempo estuvo muy regulada la presencia de otras personas que no fueran los funcionarios y alumnos, dijimos “es el momento de unir y de que venga toda la familia y que todos puedan participar. Invitar a esos padres cuyos hijos entraron estos últimos años y no conocían el colegio, el edificio, la infraestructura.

TC: La idea principal era volver a traer a las familias al Colegio.  Que los ex alumnos se vuelvan a sentar en sus clases y que puedan ver como algunas cosas cambiaron tanto y otras siguen igual que cuando ellos venían.

MV: Ya lo resumieron bastante bien Tati y Anita: la idea era hacer algo grande (buscando repeler un poco el impacto negativo de la pandemia) y nuestro objetivo principal desde el día 1 fue hacer algo grande como la fiesta de los 100, pero poniendo a las familias del Colegio como el foco principal de cada una de las acciones y decisiones del comité organizador.

¿CÓMO LAS CONVOCAN PARA ORGANIZAR ESTA FIESTA?

TC: Es un pedido del Board que se centraba en esto que te contábamos de volver a traer a las familias al Colegio y de transmitir el School Spirit y nosotras somos de esas que tenemos la camiseta del Colegio puesta.

AA: Tuvo mucho que ver Simon Roberts, siempre estuvo dispuesto a poner todos los recursos disponibles para esta idea y eso incluía nuestro tiempo para trabajar, le quitábamos un rato a nuestras tareas cotidianas para trabajar en la organización.

MV: Tal cual lo que dicen las chicas. Ya no sabemos si nos convocaron o nos metimos…. Era tal la emoción que teníamos todos de hacer esto que a la hora de proponer voluntarios, cayeron figuras clave a aportar todo su tiempo, buena onda y conocimiento.

¿EN QUE CONSISTE ORGANIZAR UN EVENTO DE ESTA MAGNITUD?

AA: Primero en imaginártelo. Si bien sabemos que la comunidad del Colegio responde ante estos acontecimientos, no teníamos idea, cuando empezamos a trabajar en marzo, cuanta gente se iba a interesar en nuestra propuesta. Por suerte pasó exactamente lo que imaginamos que iba a pasar.

Después por momento, nosotras que no tenemos mucha experiencia en la organización de eventos, la magnitud que estaba tomando asustaba un poco, pero estábamos para sumar y hacer que pase.

MV: Contemplar absolutamente TODO. Vivir pensando en el “¿qué puede salir mal?” era como nuestro modus operandi en un momento. Que si llovía, que si alguien se quebraba, que si no alcanzaba la comida. En el día a día fue clave tener un equipo sólido y confiable en donde realmente todos estaban para sumar.

¿CÓMO ARRANCA TODO?

AA: Empezamos a tener reuniones semanales en marzo y era un montón de gente representando todas las áreas del colegio, cada uno tenía la oportunidad de poner su granito de arena en la celebración y así fue. Obviamente que después había gente que tenía más tiempo disponible y se pudieron involucrar más.

Una persona que falta acá es Cote (Josefina) Costa, una parte enorme de esto.

Manu (Varela) que está en la parte de comunicación tuvo un rol importante y nos hizo sufrir hasta el último día porque estaba embarazada y tenía una panza impresionante, por suerte llegó (risas).

Cote se fue al Mundial a acompañar a Santi (Civetta) y estuvo 1 mes, pero trabajaba desde allá y siempre nos mantuvimos activas Tati y yo.

TC: Simon Roberts siempre cuenta que conoció el Colegio a distancia, estando en Argentina y siempre le sorprendió el sentido de pertenencia que tenían los ex alumnos de este colegio y a partir de allí hizo todo por venir a trabajar aquí. Fue muy importante su apoyo.

AA: Conoció el Colegio por el libro del Centennial y cuando lo vio dijo “Qué tremendo Colegio”. Un placer trabajar con él. El apoyo que nos brindó fue absolutamente clave.

MV: La idea general estaba, y obviamente era un monstruo de grande. A medida que íbamos tratando de afinar, íbamos pensando en ideas y cosas para agregar e iba quedando más y más grande, pero a su vez era algo increíble. Como dijeron las chicas tanto Simon como la Administración del Colegio siempre nos dieron para adelante con todo lo que queríamos hacer.

¿QUIÉN TOMABA LAS DECISIONES?

AA: Nos dieron libertad absoluta para decidir y en caso de cosas estructurales, más grande, con varios presupuestos nosotras se lo presentábamos a Simon y lo decidíamos entre todos.

TC: Prácticamente todo lo decidimos nosotras, nos sentíamos respaldadas.

¿QUÉ CONTENIDO IBA A TENER EL EVENTO?

TC: Lo único que teníamos claro era transmitir el School Spirit, que vuelvan las Houses. Eso que sentíamos nosotras de chicas y seguíamos sintiendo, queríamos que nuestros hijos lo vivan.

AA: Partimos de esa idea que cuenta Tati como eje central, después había que bajarlo a tierra. Ahí aparecían “las cabezas” como más concretas que ayudaban a bajar las ideas. Tuvimos que romper esa idea grande en varias más chiquitas y en base a eso se crearon comisiones de trabajo. Cada persona se iba sumando al área donde más fuerte se sentía. El apoyo del staff del Colegio fue clave.

Hubo comisiones cuyo trabajo quedó para la posteridad, como por ejemplo el Museo al aire libre que va mostrando in situ lo lugares icónicos y personalidades de la historia del colegio.

TC: Lo del museo fue una idea espectacular. Todos los sitios tienen su código QR y con el celular podés ver la historia de ese lugar, o de tal persona. Las plantas ahora tienen los carteles con sus nombres, nombre científico y foto, hechos por Victoria Cooper, que hace muchos años se encarga del paisajismo del Colegio.

AA: Hay una anécdota con eso y es que el día que tuvimos que poner los carteles Victoria no estaba y nosotras entramos en pánico de equivocarnos los nombres así que llamamos a los jardineros para que nos ayuden y por suerte le acertamos a todos.

TC: Juampi Rodríguez se encargó del diseño de los carteles y quedó divino. Yo siento mucho orgullo por el Museo.

MV: Queríamos resaltar el valor de la familia del Colegio, y a su vez buscar “algo” para cada público. Contemplamos a los más chicos, con los juegos de Sonia Pato, pensamos en los jóvenes y decidimos incluir bandas de alumnos, exalumnos y demás, ya que la música fue y es un elemento clave en la cultura del Colegio, queríamos traer a los más veteranos y se nos ocurrió desde el vamos ofrecerles tours para que volvieran a ver el Colegio, ya que está muy cambiado para los que se fueron hace unos años. Después lo del Museo Interactivo cuya implementación quedó por el camino por tema de tiempos, pero que vamos a retomarlo este año porque la idea está tremenda.

¿CUÁNTA GENTE PARTICIPO DE LA ORGANIZACIÓN Y EJECUCIÓN EL DÍA DE LA FIESTA?

TC: La verdad que nos sorprendió gratamente la cantidad de gente que se arrimó desinteresadamente, para trabajar. Teníamos a cargo 120 personas, todas del staff del colegio.

Nos ayudó muchísimo el club. Tanto Juanma (Gutiérrez) como Mauro (Costa) estuvieron a la orden desde el día 1. También Marga (Mezzera) y Elsita (Herrera) estuvieron siempre ahí, para lo que se necesitara.

AA: Para mí el staff de Colegio con este evento dio muestras de que es de primer nivel y totalmente comprometido. Y el Club tuvo una parte enorme en la organización y logística de la celebración.

MV: Adhiero a todo. Fue increíble ver esa fusión del Colegio y Club en esta instancia, y la verdad es que funcionó super bien y aceitado.

¿CUÁNTO COSTABA LA ENTRADA?

AA: Un alimento no perecedero.

¿EN QUE MOMENTO TUVIERO CERRADO TODO LO REFERENTE A LA FIESTA? ¿HUBO COSAS QUE QUISIERON HACER Y NO PUDIERON?

TC: En agosto teníamos todo cerrado, incluyendo en cake contest de Manu, que la verdad a mi mucho no me convencía y fue un éxito porque reflejaba tal cual el espíritu del Colegio. Tenía razón Manu.

Teníamos la estructura cerrada, los presupuestos y el Budget que había que gastar.

AA: Cosas que quedaron afuera, quisimos hacer un partido de rugby de ex alumnos y también se tiró la idea de un inter houses, pero después pensamos “¿Y el desfibrilador quien lo trae? (risas).

Lo que si se concretó y estuvo divino fueron los tours dentro del Colegio, visitas guiadas por gente del staff y alumnos. Creamos una landing page del evento y tú te tenías que registrar para las visitas guiadas, para las bandas en vivo y para el baking contest.

MANU ¿EN QUE CONSISTÍA EL BAKING CONTEST?

MV: El tema de las tortas siempre fue un elemento clave en todos los cumples del Colegio. O bien los alumnos llevan tortas a sus clases el 8 de octubre, o en ocasiones más importantes se llegó a llevar una torta gigante. La realidad es que la torta como tal, está ligada al cumpleaños del Colegio desde siempre. Por eso quisimos arrimar a quien se quisiera animar a hacer una competencia de tortas libre, con el tema central de “School Spirit” y la verdad es que sorprendieron un montón los grupos (desde chicos solos, alumnas con sus madres, exalumnas) y las creaciones. Fue un éxito (y todos comieron tortas riquísimas, que nunca cae mal).

¿CÓMO ARRANCÓ LA FIESTA?

AA: Primero fue un día espléndido. Tati ya en febrero me decía “tengo pesadillas con el 8 de octubre” y era la única fecha en que se podía hacer.

TC: Los portones se abrían y vos entrabas al Colegio por el mismo lugar por donde habías entrado toda tu vida y te recibían los Pipers cantando, la mascota del Colegio que fue un furor porque a los niños les fascina.

Le pusimos mucho pienso a la decoración, pero sabíamos que la gente lo que quería ver era el colegio, no necesitaba nada.

MV: El terror de Tati con el tema del clima estuvo desde marzo hasta el 7 de octubre mismo. La fiesta arrancó con una linda campaña de expectativa, en la que semana a semana se iba comunicando más cosas del evento. Por suerte el día acompañó. Fue una explosión de alegría desde la entrada: Pipers, los capitanes de los diferentes planteles de OBC, la mascota (¡un furor!) y miles de personas vestidas con remeras del color de su House con sonrisas en sus caras. Fue espectacular.

¿CUANTA GENTE ASISTIÓ?

TC: Cinco mil personas. Me llamó la atención, muchos venían del exterior.

AA: Si, se repartieron 4,800 entradas, más la gente del staff y alguno más estuvo en ese entorno.

MV: Habían apuestas de cuánta gente iba a ir. Siempre pensamos en 3.000, pero nos sorprendió gratamente el número final. Por suerte estábamos bien preparados.

¿CÓMO RESOLVIERON EL TEMA DEL ESTACIONAMIENTO?

AA: Hicimos un convenio con Cabify, hubo muchas familias que viven cerca y vinieron caminando, otras vinieron en bici.

TC: Y pasó que no estuvieron nunca las 5,000 personas al mismo tiempo. Pero sin duda que fue en tema a resolver. Inclusive previamente se les aviso a todos los vecinos sobre el evento. Por suerte no tuvimos ni una sola queja.

¿DISFRUTARON DEL EVENTO O LO “SUFRIERON”?

AA: Por momentos lo re disfruté, pero al otro día me sentía apaleada como cuando se casa tu hermano (risas).

TC: Tal cual me sentí como el elenco estable del casamiento, los que se encargan de tapar las macanas. De a ratos buscábamos a nuestras familias a ver como estaban y disfrutar un ratito con ellos.

AA: Yo a mi marido no lo vi en toda la tarde. No me pude relajar nunca.

TC: Y seguimos hasta altas horas de la noche ese día y los días posteriores también, re acomodando todo.

MV: Yo estaba de 38 semanas de embarazo y con terror a no llegar al evento. No podía caminar mucho…tenía los pasos contados y no me quería extralimitar… me daba terror parir ahí… aunque les había hecho prometer a más de uno que si paría ahí, mi hija iba gratis toda la vida al British. Más allá de que las semanas previas fueron bastante estresantes, creo que el domingo mismo fue todo de disfrute. Todos los integrantes del equipo sabíamos dónde teníamos que estar y qué teníamos que hacer. Todo funcionó. Cada escenario que habíamos planteado de “¿qué pasa sí?” no pasó y todo fue fiesta y alegría. El día sumó mucho y la gente estaba para quedarse. Destaco de nuevo el tema del equipo. Si tenés un equipo sólido, podés estar tranquila en un día así (aunque al día siguiente te sientas como que te pasó un camión por arriba).

¿HICIERON UNA REUNIÓN DE CIERRE? ¿UN INFORME?

AA: Lo armamos como un Proyect Managment y al final, un reporte.

TC: El reporte con las cosas que anduvieron, las que hay que cambiar o mejorar para futuras celebraciones. Una especie de instructivo para los próximos que quieran organizar algo en el Colegio.

¿QUÉ REPERCUSION TUVO LA FIESTA?

AA: Eso fue lo mejor de todo. Alucinante.

TC: La comunidad que nosotros tenemos es muy diversa, obvio, pero lo lindo fue que nos devolvieron mucho a través de mensajes, mails, cada vez que te encontrabas con alguien que había estado. Fue muy gratificante y cuando terminó dijimos “que suerte que lo hicimos”.

AA: Esta es una comunidad que es bien exigente en un montón de cosas en donde a veces te llegan más los comentarios negativos que los positivos, es la naturaleza humana, uno se queja más de lo que agradece y es un ejercicio que a veces hay que hacer.

Lo que pasó en este caso realmente fue imponente. Desde todos los miembros del Board, internamente desde el Principal hasta la gente de administración, muchas muestras de agradecimiento y hasta sorpresa de lo que se logró hacer.

MV: Sin lugar a dudas la llegada en la comunidad fue lo mejor. Los miles de mensajes que desbordaron las redes, los mails y llamadas. El agradecimiento de todos. Como dice Anita, esta comunidad es exigente y generalmente los mensajes y comentarios que llegan son los “malos”, pero en esta instancia, todos, pero todos fueron positivos (o capaz que los malos me los filtraron…). Tal es así que la gente ya estaba preguntando cómo anotarse para la fiesta del año que viene…. Y se empezó a hablar de hacer algo de este estilo (no de este tamaño) cada tanto tiempo, y está bueno que se haga.

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