¡Obvio! Me acuerdo de todo ese año y de esa final épica. La vuelta de Quicho Bado al Club, ¡entró en aquella final por mi hermano Foncho! Y Pishi era mi entrenador. Mis dos ídolos y jugaron juntos esa final. Una alegría tremenda. Yo tenía 15 años. Imagínate, lloraba de emoción en el medio de la cancha.
¿CÓMO SE DIO TU VINCULACIÓN CON EL RUGBY PROFESIONAL?
El puntapié de esta historia se da cuando estaba en M17. Ese año Juanchi Baldomir fue elegido entrenador para Los Teritos M19 que jugaban un Campeonato Sudamericano y un Mundial.
No era común llevar un jugador de primer año de M17.
En aquel momento la selección no me interesaba, no le daba mucha bola a las pre selecciones. A mí me encantaba jugar en el colegio con mis amigos.
La cuestión es que Juanchi un día me cita para una gira. Pero había que pagar, vender rifas y yo dije “No, gira de selección, ¡qué pagar!”.
No me presenté y Juanchi me llama: “Mirá, jugamos el Sudamericano en un mes y tenemos esta gira para prepararnos. Vení a la gira”. Era miércoles y la delegación salía el viernes. Me pasó por arriba, me dijo “Venís, yo me ocupo de todo”.
La cosa arrancaba con una gira a Rio Cuarto, Córdoba. Estábamos en 4to de liceo y todos mis amigos se iban a Bariloche de viaje de egresados ¡y Juanchi era el que organizaba los viajes a Bariloche! (risas).
Fue increíble. Pero fue allí, jugando aquel Campeonato Sudamericano, mientras todos mis amigos estaban en Bariloche, que me di cuenta que ése era el lugar donde quería estar.
Fue el manijazo que precisaba y me lo dio Juanchi en gran parte.
Aquel Sudamericano nos clasificó al Mundial de Portugal y fue el primer verano que pasé entrenando en Montevideo, acostumbrado a ir todos los años con mi familia a La Paloma.
Yo estaba re manija. Jugué aquel Mundial M20 y en ese momento el entrenador de Los Teros era el Gordo (Pablo) Lemoine. Un día me encaró y me preguntó cuáles eran mis aspiraciones con el rugby y le respondí que mi aspiración era jugar afuera. En ese entonces parecía lejano, era un sueño loco, pero el Gordo tenía contactos, había jugado en Europa y un día me puso en contacto con un agente que vendría a ser un representante.
En noviembre de 2015 yo estaba saliendo de una práctica que me citaron con el Plantel Superior de Old Boys con mi hermano Diego y veo que tenía una llamada perdida del Gordo Lemoine. Rarísimo. Lo primero que pensé fue “¿Qué cagada me mandé?” (risas). Ahí veo que tenía un audio de wapp “Que haces Manu, hay un cuadro del Top 14, el Oyonnax que está interesado en vos, llamame después”. Eran las 10 de la noche en Uruguay y el Gordo seguía en Inglaterra donde ya eran las 3 de la mañana. No me dijo nada más que eso.
Imagínate, llegamos con Diego a casa y nos pusimos a buscar donde quedaba eso y más nada.
Al otro día me enteré que tenía que ir a hacer una prueba. A los pocos días me llega el pasaje para ir a Francia a hacer una prueba para un equipo del Top 14.
Viajé solo. Me hospedaron en un hotel mientras hice las pruebas con la M23 (ESPORIS se llama la sub 23, en ese entonces era sub 23 y a la vez podían jugar máximo 3 jugadores por partido sin límite de edad del equipo profesional. Eso cambio hace dos años ya no se permiten jugadores fuera de edad) y la Primera.
Volví a Uruguay y al tiempo me llegó la propuesta formal para firmar por 3 años en el centro de formación de Oyonnax. Yo estaba en liceo. Pasaba de 5to a 6to y terminaba el año en noviembre diciembre y el contrato arrancaba en junio. Me bancaron, volví a Uruguay, firmé el contrato a distancia y terminé 6to de liceo con un contrato firmado para ir a Francia a intentar ser un jugador internacional.
Hoy hace 7 años que me vine, llegué a Francia el 27 de noviembre de 2016 con 19 años.
¿CÓMO TE FUE EN LAS PRUEBAS?
Cuando fui a hacer las pruebas estaba medio lesionado, no dije nada obviamente. Hice las prácticas, no podía jugar porque no estaba anotado, pero ellos estaban jugando a pleno. Ese primer fin de semana jugaban por Copa de Europa Oyonnax vs Saracens en Oyonnax y la M23 jugaba su clásico. Mientras miraba esos partidos me llegó la propuesta.
¿COMO FUE TODO ESE AÑO EN URUGUAY SABIENDO QUE YA TENIAS UN CONTRATO FIRMADO PARA IRTE A JUGAR A FRANCIA?
Volví a Uruguay y empezaba todo aquellos de “¡Qué vas a estudiar?”, tu entorno familiar se preocupaba. ¿Qué era esta locura de querer ser un jugador de rugby profesional?
Mis amigos estaban viendo que iban a estudiar y dónde se iban de vacaciones y yo ya sabía que me iba a Francia.
Di mi último examen del IB el 24 de noviembre. Hicimos un asado en el campo de la familia de Foncho Irureta en Santa Lucía, acampamos una noche, al otro día tuvimos la Graduación y al otro día me fui.
¿TE FUISTE SOLO?
Viajé solo y a los 2 días llego mi madre que me acompañó una semana o 10 días, los primeros días nos quedamos en un hotel y después me dieron un apartamento y mamá me ayudó a instalarme, comprar sábanas, ollas cacerolas y todas esas cosas.
¿SABÍAS COCINAR?
Sí, yo siempre me di maña y me gusta. Esas cosas no me daban nada de miedo, siempre fui bastante independiente y yo pensaba que en todo el mundo a los 18 años los pibes se van de la casa.
¿TENÍAS NOVIA?
Estaba de novio con Fede en ese entonces. Ahora vivimos juntos, pero hicimos 4 años de noviazgo a distancia. Ella me dio para adelante siempre, por suerte probamos y salió.
Fede venía en los veranos de Uruguay y se quedaba 2 o 3 meses y yo cuando terminaba la temporada, al día siguiente me volvía a Uruguay.
Coincidieron esos años también con mis primeras convocatorias a Los Teros así que la fuimos llevando.
En enero del 2021 se vino y hace 2 años que vivimos juntos.
¿CÓMO FUE EL ARRANQUE Y CUANTO TIEMPO DEMORASTE EN ADAPTARTE?
Esas primeras fiestas que pasé en Francia vino mi viejo. Yo no había recibido las notas del IB, así que cuando me las dieron y pasé, fue una alegría que el esté ahí conmigo.
A los pocos días se volvió a Uruguay y ese fue el primer tirón que estuve solo, faltaban 6 meses para que termine la temporada y yo tenía firmado un contrato por 3 años. Empecé a jugar, a conocer gente, a tomar clases de francés. Había aprendido algo porque antes de venir había tomado unas clases con la mujer de Quicho que en aquel momento vivían en Uruguay. Pero básico y yo tenía que hablar porque necesitaba entender y comunicarme en francés. Yo llegué un martes a Francia y el jueves cuando dieron el equipo de los Espoirs (quiere decir esperanza en francés), estaba de titular. Jugábamos contra Agen y yo no entendía nada. Había gente que hablaba en inglés, pero en Francia se habla francés. Por suerte lo aprendí muy rápido y tenía unos compañeros que eran muy cracks.
Al principio me limitaba a relacionarme con los 5 o 6 que hablaban inglés, pero enseguida me fui relacionando también con los franceses, me empezaron a invitar a sus casas y yo entendía la mitad de las cosas, pero estaba muy entusiasmado con aprender el idioma y la cultura. Yo tenía 19 años, pero sabía que había ido a Francia a hacer carrera, no a estar un año y volver.
Extrañaba cosas, pero en general la pasé muy bien porque estaba convencido de lo que estaba haciendo.
¿CUÁNDO DEBUTASTE EN LOS TEROS?
En el sudamericano 2017 clasificatorio al Mundial de Japón 2019. Ese mismo año jugué el Mundial M20 con Los Teritos en Uruguay y me tocó compartir plantel con el Foya, Cive, Juanma Fernández, el Negro García, Marcos Pastore. Estuvo tremendo.
Jugar con Uruguay me hacía tener que volver y estar más tiempo en mi país, lo que era tremendamente motivante.
EMPIEZA LA PREPARACIÓN PARA EL MUNDIAL DE JAPON 2019 ¿EN AQUEL MOMENTO CUALES ERAN TUS ESPECTATIVAS RESPECTO DEL RUGBY?
El primer contrato que había firmado se terminaba en junio de 2019. 6 meses antes Oyonnax me ofreció renovar ya como Profesional por 3 años más, hasta julio de 2022. Así que fui a Uruguay a preparar el Mundial ya sabiendo que después volvía a Francia.
Yo sabía que el primer contrato era una apuesta del club hacia mí, podía ser un fiasco o no. Conseguir firmar un segundo contrato para mí era lo más duro y lo que más me motivó todo ese tiempo para meterle duro.
Ese fue el momento que dije “Llegué”.
CON RESPECTO A ESO PODEMOS DECIR QUE LAS EVALUACIONES QUE HACEN LOS CLUBES PROFESIONALES NO SOLAMENTE PASAN POR COMO JUGAS AL RUGBY SINO TAMBIÉN COMO TE MOVES COMO PERSONA. ¿ES ASI?
Totalmente. Profesionalismo.
Acá hay 45 jugadores profesionales por plantel, los clubes tienen que contratar buenos jugadores, pero también buenos tipos. Si se te pudre un plantel se puede hacer muy largo el año.
También se apuesta mucho a la persona, que estudie. La parte humana es fundamental.
¿CÓMO ERA ESE PRIMER PLANTEL PROFESIONAL QUE COMPARTISTE EN OYONNAX? HABIA FIGURAS PESADAS?
Me tocó subir con varios de mis compañeros de Espoirs y estábamos espalda con espalda. Es duro, durísimo estar en un vestuario siendo un pibe. Se hace sentir.
¿CÓMO ES ESO? ¿TE TIENEN MEDIO CORTO? ¿NO TE DAN BOLA?
Y…te prueban. A ver si sos un hombre o todavía no. Creo que si entrenas duro y hacés las cosas bien te terminas ganando el respeto. Si llegas medio creído te lo hacen sentir. Pero ta, la verdad es que siempre me llevé bien con todo el mundo, hay momentos que son apretados, pero por algo estás ahí. Es muy vieja escuela, a mí me gusta. Los pibes son los que ordenan los materiales después de las prácticas y todo eso yo lo tenía inculcado y me salía natural. Hay que ganarse el respeto en ese vestuario y estoy contento que haya sido así.
¿CÓMO TE FUE ESA PRIMERA TEMPORADA EN PRO D2? ¿JUGASTE MUCHO?
Tuve suerte. Habíamos subido al Plantel Profesional 3 segunda línea, más los que ya estaban. No había lugar para los 3 y el técnico no me ponía nunca. Un día lo encaré y le dije que me quería ir a préstamo a un club donde juegue, que yo había ido a Francia a jugar al rugby, no a ocupar un lugar.
El loco me dice “No, yo cuento contigo”. “Ok es bueno saberlo” le respondí.
Me fui a la gira con Los Teros que jugamos contra Fiji en 2018 y cuando volví, sin decirme nada el sábado me pone de titular y antes del partido viene y me dice “Vi que jugaste y lo hiciste bien, quiero que hagas lo mismo acá”. Jugábamos de locales contra Montauban.
Oyonnax / Montauban – Saison 2018/2019 – PROD2
Jugué todo el partido bastante bien. A la semana siguiente me volvió a poner de titular y se dio que se lesionaron un par de compañeros y el técnico me terminó eligiendo como uno de los titulares. Jugué un montón ese año, estuvo buenísimo.
¿CÓMO VIVISTE ESE PROCESO EN LA SELECCIÓN HASTA EL MUNDIAL DE JAPÓN?
Habíamos clasificado jugando contra Canadá con Meneses como Técnico. Al Mundial iban 31 y empezamos entrenando 35 jugadores, un grupo muy chico. Fue la pretemporada más dura que hice en mi vida. Craig White, el galés que se ocupó de la parte física y mental lo primero que dijo fue “Inglaterra, Francia, Irlanda etc. entrenan así. Si ustedes pretenden hacer algo parecido, tienen que entrenar así”. Nos hizo darnos cuenta que había que creérsela, nos cambió la cabeza.
Personalmente estaba muy contento porque estuve en Uruguay de mayo hasta el mundial que fue en septiembre, compartiendo con mi familia, mi novia y amigos. Lo disfruté al 200 por ciento.
LLEGA TU PRIMERA EXPERIENCIA MUNDIALISTA. SI BIEN VOS VENÍAS DE UNA EXPERIENCIA DISTINTA, JUGAR UN MUNDIAL ES OTRA COSA
Totalmente. Otra dimensión. Como si te dijera un sueño, pero mucho más grande porque vos soñas, te imaginas el partido, pero el Mundial implica mucho más que un partido de rugby. Toda la preparación previa, el grupo, el viaje a Japón, una cultura totalmente distinta a la nuestra.
Y nosotros con un objetivo muy loco que era ganar el primer partido del Mundial. Capaz hoy ese objetivo no sea tan loco, pero en aquel momento era una locura.
Estábamos convencidos de esa locura, pero costó convencerse. Me acuerdo que durante la preparación tuvimos una reunión con el Staff y me preguntaron ¿Vos pensás que le podemos ganar a Fiji y/o a Georgia? Y yo dije que no. Hacía los números y no cerraba. Pensaba en los jugadores que tenía Fiji y no me daba la cuenta. Sabía que iba a dejar todo para ganarles, la lógica indicaba que no daba, pero eso es lo lindo del deporte, que la lógica no siempre gana.
LLEGAN A JAPÓN, EMPIEZAN A PASAR LOS DÍAS Y SE EMPIEZA ACERCAR EL DEBUT CONTRA FIJI ¿CÓMO FUE AQUELLA PREVIA Y AQUEL MITICO E HISTÓRICO PARTIDO?
Al principio llegás al Mundial y es como una colonia de vacaciones. Todo nuevo, todo muy divertido, pero después nos mudamos a Kamaishi, que era la ciudad dónde íbamos a jugar. Llegamos al hotel que era increíble, sobre la playa, nos pusimos un traje de baño y nos tiramos todos al mar, staff y jugadores. Después la gente local nos contó que en ese lugar 7 años antes hubo un Tsunami y que recién se estaban volviendo a levantar. Fue todo muy emotivo. Éramos un puño.
Al otro día entrenamos y se venía el partido, ya el ambiente era distinto porque se empezaba a perfilar quienes iban a jugar y quienes no, había gente que iba a estar muy contenta y otra que iba a estar muy triste. Y es un momento durísimo. Juegues o no, tenes amigos que no van a jugar y eso se empieza a sentir.
Dieron el equipo. Para mí, iba a ser mi primer partido en un Mundial. Unos nervios… por suerte jugábamos temprano, salimos a caminar esa mañana, se llevó bien el día.
Me acuerdo estar cantando el himno y se me vino a la cabeza lo que había pasado contra esos mismos tipos hacia muy poco tiempo. Obvio que me tenía fe, pero lo tenía muy presente.
Empieza el partido y nos meten un try y ahí pensé “No nos puede volver a pasar lo mismo”. Nos juntamos y dijimos “No puede volver a pasar esto, vamos y vamos”. Y cuando empezaron a pasar los minutos, los pasamos en el tanteador, y terminó el primer tiempo nos mirábamos y decíamos “Les podemos ganar”. En el entretiempo nos preguntaban si estábamos cansados y estábamos para jugar 3 partidos más.
Siguió pasando el tiempo y cuando faltaban 2 minutos íbamos ganando por más de 7 puntos. Era hacer las cosas bien, o no muy mal y lo ganábamos. Y en un momento nos dimos cuenta de que iba a pasar.
Esos minutos antes de que termine fueron increíbles. Lo pienso ahora y se me pone la piel de gallina.
RUGBY WORLD CUP JAPON 2019. FIJI VS URUGUAY
¿QUÉ PASÓ DESPUÉS DEL MUNDIAL?
El campeonato en Francia ya se estaba jugando. Desde Japón el equipo volaba a Londres y después a Uruguay. Yo tenía 10 días libres, había un par de jugadores que se quedaban y nos fuimos a hacer un viajecito por Europa, después me fui a visitar a un amigo en Roma y estando en Roma paseando me llama el técnico de Oyonnax, que en ese ínterin había cambiado el staff y era nuevo y me dice “Sé que te quedan unos días de vacaciones, pero se lesionó un segunda ¿Estás para venir?”. “Sabelo, voy”. Cambié el vuelo y empecé a jugar de vuelta. Había técnico nuevo y me tenía que volver a ganar el puesto. Mis compañeros de Los Teros se volvían a Uruguay con la temporada terminada y yo estaba arrancando. Fue largo ese año y me terminé lesionando. El cuerpo me pidió una pausa.
¿QUÉ TE PASÓ?
Tuve lo que se llama una fractura de fatiga en un hueso de la mano. Se le llama así porque no tiene explicación, pero no hubo un golpe. Fue un tackle normal en donde no tuve ningún golpe en la mano y me la rompí.
Me vino bien, paré 4 semanas, volví a Uruguay para las fiestas y estuvo muy bueno. A mediados de enero ya estaba jugando de nuevo.
HACENOS UN RESUMEN DE LO QUE FUERON ESOS 4 AÑOS ENTRE EL MUNDIAL DE JAPON 2019 Y EL DE FRANCIA 2023
Yo empezaba mi segundo contrato como profesional en Oyonnax. El objetivo de Los Teros era clasificar a Francia como América 1, que era la primera vez que teníamos la chance de hacerlo, antes el 1 se lo disputaban entre Estados Unidos y Canadá nomás. Se abrió la ventana para que Sudamérica pueda competir por el 1. Me acuerdo que veía la llave y el que entraba como América 1 iba al grupo de los All Blacks, Francia y América 2 entraba en casi la misma zona que habíamos tenido el Mundial pasado. Yo quería jugar contra otros equipos. El objetivo era grande, pero si lo lográbamos, cambiaba todo.
En 2021 le ganamos a Estados Unidos y logramos el primer gran objetivo. Eso te daba casi 2 años para prepararte. Para un país como Uruguay eso es muy importante.
Volví a Francia. A mí se me terminaba el contrato en junio de 2022. Oyonnax me ofrece para quedarme, pero sentía que necesitaba cambiar de ciudad, conocer gente nueva, sentía que si me quedaba me iba a estancar, necesitaba un desafío nuevo.
Entonces le dije a Oyonnax que no me quería quedar y no se lo tomaron muy bien al principio, no entendían mi actitud.
Todo esto se los decía sin tener ninguna oferta, me tiré a la piscina para ver qué pasaba.
¿TENÍAS AGENTE?
Siempre tuve, acá el 99% de los jugadores se manejan con agentes. En este caso el que tenía no me conseguía nada y decidí cambiar.
En noviembre el nuevo agente me consigue una oferta de Bayonne. En ese momento los dos clubes, Oyonnax y Bayonne estaban jugando en Pro D2 y éramos 1 y 2 peleando para subir al Top 14.
Yo precisaba un cambio y chau, podía pasar de que suba Oyonnax y yo me iba a un club de segunda pero no me importaba.
¿Y QUÉ PASÓ?
Es una locura lo que pasó.
La semifinal del Pro D2 fue Oyonnax vs Bayonne. Yo jugaba para Oyonnax ya habiendo firmado y se sabía públicamente, para el otro cuadro. Perder implicaba seguir en Pro D2, ganar implicaba jugar la final para ascender al Top 14. Imaginate en la situación que me encontraba. Me agarra el técnico que no me estaba poniendo mucho porque sabía que yo había firmado para el club contra el que íbamos a jugar y me pregunta que pensaba. Yo le respondí “cuando entre a la cancha, lo voy a hacer para ganar. Para perder no estoy”.
-Ok me respondió- entonces vas a jugar de titular.
Vinimos acá a jugar contra Bayonne y perdimos y la semana siguiente Bayonne gana la final y asciende al Top 14.
¿Y LA HINCHADA DE OYONNAX?
Fue la semana más dura que pasé en Francia.
Mis compañeros de equipo confiaban en que yo iba a dar todo y mi cabeza me decía que el resultado no importaba, yo tenía que jugar un buen partido porque si no me iban a tildar de muchas cosas que no me gustan y que no soy.
Por suerte jugué bien, pero Bayonne tenía más equipo, llegaron mejor. Yo me fui re bien del club, sigo teniendo tremenda relación.
¿CÓMO SIGUIÓ LA HISTORIA?
Había firmado por 2 temporadas así que en junio me mudé, jugué la temporada pasada con Bayonne en Top 14 y terminamos octavos. Para un equipo que ascendió fue tremenda temporada. Jugué bastante, estuvo muy bueno. Fue mi primera temporada en Top 14.
Cuando terminé me vine a Uruguay y comenzamos la preparación para el Mundial de Francia.
¿CÓMO FUE LA PREPARACIÓN TENIENDO EN CUENTA QUE TENÍAN QUE DEBUTAR CON EL LOCAL Y UNO DE LOS FAVORITOS, DEPUES EN EL MEDIO LOS 2 PARTIDOS QUE IBAN A TRATAR DE GANAR Y TERMINAR CON LOS MEJORES DEL MUNDO?
Primero que nada, llegamos a este Mundial con otra base. Los pibes que estaban en Uruguay venían jugando profesionalmente, había jugadores disputando el circuito mundial de seven. Uruguay no era el mismo que el de 2018/19. La zona era una locura, pero nosotros ya nos sentíamos capaces de afrontar eso.
Para mí era la serie soñada, todos soñamos con jugar contra los All Blacks. Yo los admiraba y ahora, después de haber jugado contra ellos, más todavía. Después Francia en Francia, que para mi tenía un condimento especial porque es el país que me adoptó y lo siento como mi segunda casa. Jugar contra ellos fue increíble.
Después estaba Namibia que era el partido que teníamos obligación de ganar y el partido contra Italia que significaba hacer otra locura.
Un objetivo así te da hambre.
La semana previa al debut el sentimiento general era ¿Por qué no ganarle a Francia? Recuerdo que un periodista francés me hizo una nota y me preguntó:
– ¿Qué objetivo te propones?
-Ganar.
-Sabes que es imposible.
-Bueno, déjame soñar tranquilo. Si no soñas la locura, nunca va a pasar.
Volviendo a tu pregunta de cómo organizar la estrategia para jugar esos 4 partidos, problema de los técnicos. Yo personalmente nunca lo pensé, pensaba en ganarme un lugar y jugar todo lo que pueda, al mejor nivel posible.
Estar en los pantalones del staff, durísimo, pero cuando me hacían esa pregunta les respondía “preguntale a Meneses”.
¿LOS JUGADORES TE PREGUNTABAN POR LOS FRANCESES?
Si alguien me preguntaba yo le decía “son como nosotros, cualquier jugador de Los Teros tiene nivel para jugar en Francia. Partidos más duros que los del Mundial no hay acá”.
¿ESPERABAN QUE EL SCRUM FUERA TAN DURO? LOS FRANCESES GENERARON MUCHOS PENALES DESDE ESA FORMACION Y SI BIEN URUGUAY DESPUÉS LOGRA EMPAREJAR ALGO, EL PRIMER TIEMPO FUE UN SUFRIMIENTO
Sí, capaz no hicimos el suficiente foco en eso, no esperábamos que la diferencia en el scrum sea tan dura. El último equipo duro de scrum que habíamos jugado había sido Georgia un año antes, y habíamos andado bien.
Sufrimos un montón y no supimos encontrarle la vuelta, yo pensé que el partido se nos iba por ahí, pero al final logramos nivelarlo, tuvimos nuestras pelotas y hasta logramos algún penal de scrum francés.
Pero el primer tiempo fue duro, por suerte defendimos bien el maul, ellos pensaron que iba a ser todo penal, line, maul, try, tuvieron algunas oportunidades y no pudieron entrar. Y eso nos alimentó la confianza, Francia termina pidiendo palos y los silba todo el estadio. Ahí, quieras o no, se te infla el pecho.
Uruguay pile the pressure on France | France v Uruguay | Rugby World Cup 2023 Highlights
LA JUGADA DEL TACKLE ALTO A ARATA ¿ERA ROJA?
Para mí sí. No tengo nada más para decir, pero si ese tackle lo hacía yo, era roja.
LA JUGADA DEL TRY QUE LE ANULAN A ETCHEVERRY SI ERA AL REVES ¿PENSAS QUE HUBIERAN REVISADO Y ANULADO EL TRY?
Para mí que no, espero poder creer que sí, porque si no me saca las ganas de jugar. Pero ¿sabes que me dejo un poco tranquilo? World Rugby te manda un juez durante todo el Mundial y con nosotros estaba John Lacy (ex-árbitro internacional muy reconocido) le pregunté y su respuesta fue “Capaz que no lo hubiera visto, pero si el TMO me lo dice, también lo anulaba”.
¿QUÉ OPINAS DEL REFERATO EN GENERAL DEL MUNDIAL?
Se le dio demasiada importancia. Nos jactamos de que el rugby es un deporte de caballeros y que al juez no se le discute y al fin y al cabo estamos tirando todo por la borda.
La decisión es en la cancha y al juez lo ayuda el TMO, pero el tipo durante el partido tiene diez mil cosas para ver, yo no quisiera estar en su lugar.
¿RECORDAS ALGO EN ESPECIAL DE LA SEMANA PREVIA AL PARTIDO CON ITALIA?
La encaramos con bastante confianza, pero también con mucho nervio. Veníamos de hacer un tremendo partido contra Francia y para nosotros era “la semana” del Mundial. La que veníamos preparando desde hacía 2 meses por fin estaba llegando. Esa mezcla de ganas de que el partido sea hoy y por otra parte que no se termine. Además, ese partido en Niza fue dónde más uruguayos hubo, familiares, amigos. El hotel era un desfile de gente conocida. Fue una semana muy linda desde lo afectivo.
LLEGA EL DÍA DEL OBJETIVO MAS AMBICIOSO Y URUGUAY JUEGA UN MUY BUEN PRIMER TIEMPO ¿CÓMO FUE EL ENTRETIEMPO DEL PARTIDO CON ITALIA? ¿QUÉ SE HABLÓ?
Estaba saliendo lo que habíamos planteado. El equipo estaba bien, estábamos con “patas”. Dijimos “Son 40 minutos más, no dejemos pasar la oportunidad de lograr el objetivo máximo que nos propusimos”. Había tranquilidad, se manejó bien, no había tanto para corregir, era seguir por ese lado.
¿QUÉ FUE LO QUE PASÓ?
Italia cambió la estrategia y nosotros tuvimos esa amarilla a Fatiga (Andrés Vilaseca) que fue muy importante por el momento. Esos 10 o 15 primeros minutos del complemento era clave aguantarlos porque sabíamos que se iban a venir y ahí se nos empieza a ir el partido.
Habíamos hablado de flotar en la defensa porque Italia es un equipo que te juega muy arriba y teníamos que tener paciencia para recuperar la pelota, pero empezaron a proponer un juego mucho más frontal y agresivo y no tuvimos solución a esa propuesta.
La amarilla nos costó carísimo y en 10 minutos nos hicieron 3 trys si no me equivoco.
¿PENSAS QUE SI ESA AMARILLA NO HUBIERA EXISTIO EL TRAMITE HUBIERA SIDO DIFERENTE?
Sí, yo creo que sí. No te digo de ganar o perder, eso ya es otra cosa, pero creo que el score y el partido hubieran sido mucho más cerrado.
Lo que pasó hizo que se nos venga abajo todo muy rápidamente y psicológicamente nos liquidó.
¿ESPERABAN ESA REACCIÓN DE ITALIA?
No. Me imaginaba un partido mucho más cerrado hasta el final de lo que fue. Parecían dos partidos distintos. Mucho mérito de Italia que no solo cambió la estrategia sino también la actitud. En el primer tiempo los habíamos dominado en el contacto, pero parece que hubo una puteada de esas que funcionan en el vestuario italiano y jugaron otro partido.
Italy v Uruguay | Rugby World Cup 2023 Highlights
¿LES COSTO RECUPERARSE DE ESA DERROTA O DIERON VUELTA LA PAGINA RÁPIDO? NO HABÍA TIEMPO PARA BAJONEARSE.
Fue durísimo. Había un montón de uruguayos, miles, amigos. Tenías ganas de compartir ese momento con ellos y a la vez encerrarte en el cuarto y no ver a nadie. Fue un momento muy duro de verdad, por lo menos para mí. No tenía consuelo. Se venía Namibia en una semana, pero el objetivo mayor lo habíamos perdido que era ganar 2 partidos y lo que quedaba era Namibia y Nueva Zelanda.
EL PARTIDO CON NAMIBIA ¿LO DISFRUTASTE O LO SUFRISTE?
Lo disfruté. Empezamos perdiendo, no fue el partido ideal, pero cuando vas perdiendo por errores tuyos y tenes confianza en que tenes todo para ganar, estas tranquilo. Yo en lo personal lo disfruté muchísimo. Estábamos jugando en tremendo estadio, cincuenta mil personas en un Uruguay Namibia, jamás nadie podía imaginar esa cantidad de gente en ese partido.
Los primeros minutos fueron complicados, pero fueron errores muy chotos nuestros, era ponernos un poco las pilas y el partido estaba.
Uruguay – Namibie : le RÉSUMÉ du match ! (Coupe du monde de Rugby 2023)
COMENZABA A TERMINARSE EL MUNDIAL PERO EL FINAL ERA SOÑADO. CONTANOS ALGO DE ESA SEMANA POST NAMIBIA Y PREVIA AL CIERRE CONTRA LOS ALL BLACKS
En lo personal no sentía nervios por un partido de ese calibre. Jugar contra los All Blacks es el sueño máximo de cualquier jugador de rugby. Yo me crie en la época que los All Blacks ganaron todo. Era despertarse temprano a ver el Haka y verlos ganar todos los partidos. Jugar contra ellos era cumplir un sueño, pero a la vez había que estar a la altura para que no sea un papelón mundial. Ese era el único miedo, porque ellos son capaces de detectar una debilidad y meterte 150 puntos. Son de los pocos equipos que tienen esa mentalidad de que, si te tienen para noquear, te van a noquear. No te tienen piedad en absoluto y eso es lo que los hace tan grandes.
Fue una semana muy especial porque había jugadores de mucha envergadura que todavía no habían jugado, o habían jugado muy poco y armar ese último plantel era complicadísimo para el staff. Había jugadores que probablemente era su último partido con Los Teros, había otros que todavía no habían jugado y a la vez era un partido en donde no te podías salir mucho del mejor equipo que podías meter por todo lo que dijimos antes, de que podía ser una catástrofe.
Fue una semana muy cargada desde lo emocional. Se terminaba el Mundial y lo único que yo quería era estar en ese equipo que iba a jugar con Nueva Zelanda.
Se dio la lista y mucha gente se llevó un gran disgusto y otros una alegría como yo, que no se puede compartir mucho porque tenes compañeros que quedaron afuera. Es de los momentos más duros que tiene el rugby de selección.
¿QUÉ SENTISTE EN EL MOMENTO DE ENTRAR AL TUNEL Y ENCONTRARTE CON LOS ALL BLACKS ANTES DE SALIR A LA CANCHA?
Tienen un aura, una mística que la sentís, sentís la presencia, pero llega el momento que tenes que tomarte el atrevimiento de decir “No respeto más a nadie” porque si te vas a poner a mirarlos adentro de la cancha el resultado podía ser catastrófico. Ahí tenés que concentrarte en querer “destruir al 5 que tenes enfrente” porque él me va a querer destruir a mí, así que voy a tener que ser mejor que él. Así es como yo me tomo los partidos. Tratar de no ser un espectador dentro de la cancha, sino ser partícipe.
¿QUÉ TE QUEDÓ DE ESA EXPERIENCIA ÚNICA E IRREPETIBLE DE JUGAR CONTRA NUEVA ZELANDA EN UN MUNDIAL?
Positivo, 100 %. Notás que son gente con mucha humildad, una humildad distinta a la nuestra. Nosotros nos tiramos para abajo, pero ellos se la creen. Me quedo con la actitud de Whitelock (Samuel) que ese día, contra nosotros cumplió 150 partidos con los All Blacks y después del partido vino a nuestro vestuario, le regalamos una camiseta y era uno más de nosotros. ¿Entendes? Uno de los jugadores más grandes de la historia nos habló como “Bo, yo nunca había soñado siquiera jugar un partido para los All Blacks”. Te dabas cuenta de que era una persona igual a vos. Un crack total.
En cuanto al partido, positivo. Nos comimos 70 puntos que son un montón, pero los primeros 25 minutos estuvimos en partido, de a ratos pudimos jugar.
Después sobraban por todos lados, son aviones y no cometen errores con la pelota, pero en el contacto 1 a 1 estuvimos bien y si ves por momentos le hicimos partido y nos sentimos cómodos. A años luz, pero estuvimos presentes.
Nunca vamos a estar a ese nivel, pero jugamos 80 minutos contra ellos y se puede.
¿CÓMO FUE EL POST PARTIDO?
Una lástima porque jugamos muy tarde, arrancó a las 9 de la noche ese partido. Para nosotros era el cierre y para ellos el Mundial recién estaba empezando. Igual nos recibieron en el vestuario, charlamos, les cambiamos hasta los calzones. Ellos seguían el Mundial entonces no te podían cambiar todo, pero nosotros como buenos uruguayos hicimos que salgan trueques de todos los colores (risas).
Fuera de joda, compartir esos momentos con ellos son cosas que quedan para el resto de la vida, porque en ese momento los ves como personas. Tomarte una birra con Ardie Savea es algo que queda en el librito de los recuerdos.
¿CÓMO DEFINIRÍAS EL PROCESO DE ESTEBAN MENESES AL MANDO DE LA SELECCIÓN?
Creo que fue un proceso de crecimiento. Tendríamos que haberle ganado a Italia y clasificado al próximo Mundial para que sea la película perfecta. Pero sin dudas que fue un período de crecimiento. Empezó en 2016 con todo el plantel amateur y se terminó yendo al Mundial con 33 jugadores profesionales.
Evolucionamos muchísimo por todas partes. Uruguay dejó de ser un equipo que tenía buen line y maul, scrum y no mucho más. Hoy es un equipo que juega al rugby.
Creo que eso se vio y se valoró mucho y para los jugadores fue un cambio total porque el deporte es mucho más divertido cuando proponés, cuando jugás.
Yo jugué mi primer partido en 2017, después del 2015 hubo un recambio grande. Fuimos un grupo de personas que disfrutamos y vimos el crecimiento.
Lo tomo como un proceso muy lindo y de mucho aprendizaje.
¿CÓMO TE IMAGINAS LA CONTINUIDAD DE MENESES? ¿QUIEN DEBERÍA O QUIEN TE GUSTARÍA QUE SEA EL NUEVO ENTRENADOR?
No tengo la menor idea de qué va a pasar, encima estando lejos soy el último en enterarse. Pero me imagino que va a ser alguien de afuera. Tiene que ser alguien con mucho conocimiento, que traiga ideas nuevas. Un cambio de aire que quieras o no, es necesario.
Los procesos tienen que terminar en algún momento y está bueno que terminen en una nota mayor, en un momento bueno. Hay que saber irse con lo ganado y eso es algo muy bueno de este staff del Mono.
En definitiva, no se quien vendrá, pero me motiva mucho que sea alguien con nuevas ideas, que traiga a su gente. Que se re plantee todo de cero. Ya no hay más titulares, que todos los jugadores del rugby uruguayo tengan una oportunidad.
¿CÓMO ES UNA SEMANA EN TU VIDA MANU?
Mi semana empieza el lunes yendo al club. Por la mañana tenemos distintas reuniones de análisis de formaciones, ataque, defensa etc. Hacemos un repaso de lo que fue el fin de semana anterior y se empieza a preparar el partido que viene.
Almorzamos en el club, después tenemos un rato libre y jugamos a las cartas, algunos juegan a la play, te tomas un cafecito.
De tarde tenemos gimnasio, reunión de equipo, cancha y terminamos tipo 4 y media de la tarde.
Después el martes es un día completo. Llegamos al club antes de las 8, desayunamos, nos presentan todas las jugadas en video, las hacemos caminando, lo mismo que el line. Una activación física y cognitiva y empieza el entrenamiento de alta intensidad. Físico, formaciones, cancha. No se hace mucho contacto porque el campeonato es duro y largo, todo contacto controlado.
Almuerzo, un rato libre y de tarde tenemos gimnasio y unidades. Los forwards hacen line y los backs hacen pases y destrezas individuales.
Miércoles de mañana libre pero el club está abierto, se puede ir a hacer recuperación, fisio, el que no quiere no va, se puede ir a hacer destrezas, pases. A la tarde es libre y no se puede ir al club.
Jueves desayunamos en el club, hacemos video, gimnasio, cancha almorzamos y a eso de las 2 de la tarde termina.
El viernes que es el día previo al partido se hace una activación física de media hora, algo de potencia en el gimnasio y después en cancha el captains run. Después de eso quedamos libres para el resto del día.
Cuando jugamos de visitantes viajamos el viernes después del entrenamiento y regresamos el sábado después del partido. Si es de local, nos juntamos al mediodía, almorzamos, después tenemos un rato libre algunos duermen la siesta y 2 horas antes del partido nos juntamos en el vestuario, charla y empieza la preparación para jugar. Después del partido te vas a tu casa.
Los domingos libres.
¿QUÉ HACES EN TUS RATOS LIBRES?
Acabo de terminar la carrera de Administración en una Universidad francesa, pero en inglés. Hace una semana me dieron las notas y por suerte todo aprobado.
Me gusta mucho el surf, acá estoy cerca de la playa, a 10 minutos y una vez por semana me voy con la tabla.
También hago de jardinero acá en casa que me gusta, pero generalmente lo que hago en los ratos libres es estudiar.
SOS MUY JOVEN ¿CÓMO ES TU FUTURO?
Ojalá lo supiera, te digo lo que me gustaría. Quiero seguir jugando rugby profesional hasta que me den las ganas y/o el físico. Tengo 26 años, me siento bien y me encanta lo que hago así que ojalá sea por unos cuantos años más.
Tengo contrato acá hasta junio de 2024. Estoy viendo si renuevo o si me cambio de club, todavía no lo sé. Eso generalmente se define entre fin de año y febrero aunque hay tiempo hasta el 30 de junio para firmar contrato.
¿TE VES VOLVIENDO A VESTIR LA AZULGRANA?
La verdad, me encantaría. Todavía no sé qué va a ser de mi vida, me encantaría vivir en Uruguay después de terminar el rugby profesional y es como te decía, ojalá me den las ganas y el físico. El rugby profesional es una moledora de carne donde jugas 11 meses por año. El campeonato francés tiene mínimo 30 partidos por año, más los partidos con Los Teros. Es un desgaste físico y mental grande.
Ojalá se dé, hoy te digo me encantaría. Cuando tenga la edad para decidir eso lo evaluaré, pero en algún lado del club me encantaría estar.
QUIÉN TE DICE QUE NO REPITAS LA HISTORIA DE QUICHO BADO QUE VOLVIÓ AL CLUB PARA SER CAMPEÓN